En este capítulo se han presentado los AE como una potente herramienta para resolver problemas de ingeniería. Son una rama de la computación que explora nuevas aproximaciones inspiradas en la biología. Los sistemas computacionales que se necesitan actualmente para resolver ciertos problemas requieren adaptabilidad, paralelismo, capacidad de aprendizaje y creatividad, lo cual nos hace pensar que debemos imitar los sistemas naturales que posean dichas características.
Se ha aplicado la idea de ``evolución'' más allá de la Naturaleza y de los paradigmas computacionales evolutivos clásicos, apuntando las limitaciones que presentan hoy día la mayoría de las aproximaciones que intentan ofrecer una visión unificada de todos esos paradigmas.
Se ha presentado la abstracción para computación evolutiva, denominada ``Objetos Evolutivos'' (OE), basada en la programación orientada a objetos y que reune las características comunes a todos los paradigmas evolutivos.
OE hace énfasis en la modularidad a la hora de programar una aplicación evolutiva. Debido a que tanto los operadores como el resto de entidades son objetos, resulta fácil combinar diferentes operadores y objetos de distintas fuentes para construir una aplicación determinada.
OE prescinde de la necesidad de representar las soluciones, haciendo evolución de objetos complejos directamente usando operadores genéticos, y estableciendo, mediante interfaces, el modo en que unos objetos acceden a otros.
Se ha mostrado la facilidad de uso de OE y de la robustez y capacidad de resolución que presenta, resolviendo dos problemas clásicos de búsqueda en superficies multimodales con sendos programas desarrollados con la biblioteca presentada.